Un taller de bordados en Madrid bebe de una de las tradiciones más antiguas de España, aún antes de que tuviera ese nombre. Y es que la industria textil del antiguo Reino de Castilla era importantísima y tuvo un papel fundamental en el enriquecimiento del reino ya que exportaba lana a los vecinos países europeos. En el antiguo Reino de Aragón también era muy importante, especialmente los talleres de bordados. Curiosamente, la industrialización en Cataluña consistió sobre todo en talleres medianos en los que se cosía y bordaba la ropa, uno de los antecedentes más importantes de los talleres actuales.

Hoy en día, en talleres de bordados como Bordados Tecnibor, S.L. no solo se realizan todo tipo de bordados textiles sino que también se han modernizado con otras técnicas como la serigrafía y tienen la mayor parte de su negocio enfocado al bordado y serigrafía publicitario, puesto que en la ropa tradicional es mucho más complicado encontrarlo, al haberse deslocalizado la producción a países del Tercer Mundo con mano de obra más barata o incluso en condiciones de cuasi esclavitud.

Poca gente sabe que un superviviente taller de bordados en Madrid dice mucho de la época en la que logramos ser la principal potencia mundial y reconquistar la Península Ibérica gracias al oro que se consiguió con la venta de lana y bordados a países como Francia o Inglaterra. La tradicional trashumancia de la Meseta castellana también fue clave en este aspecto siendo el primer paso en un proceso en el que intervenían muchas personas.